15/8/10

Un buen chico X


No sé si se dio cuenta de que estaba excitado o tenía un sexto sentido muy desarrollado, simplemente intenté mirar hacia otro lado cuando dijo eso y carraspeé.

-Dormir, digo dormir de dormir.-comenté intentando olvidar todo lo que vino a mi mente en segundos.-Además, ahora sólo tengo que ir a entrenar por las tardes e intentaré estar hasta tarde en la cama.

-Ah ¿Qué piensas hacerlo costumbre?-preguntó levantando una de sus cejas- Hiza, tu tienes un departamento que habitar, por si no lo recuerdas...-cerró los ojos estirándose.-Me siento cansado, pensé que no me agectaría el viaje. Pero ya ves, la ancianidad me esa.-rió bajo y me miró frente a frente.-¿Vamos a casa ya Hiza? ¿O quieres quedarte un rato más aquí?

-Voy a pagar y vengo a por ti.-dije levantándome para besar su mejilla e ir a pagar.

Estuve unos minutos despidiéndome de mi amigo, crucé la barra y le di un abrazo. Intenté parecer normal, aunque estaba con ganas de ir a por Olivier y hacerselo en la barra delante de todo el mundo. Me dijo que le debía un cd mío, yo lo apunté mentalmente que la próxima se lo llevaría. Cuando regresé hacia él puse el brazo para que se sostuviera y saliéramos.

Así estaba bien, con esos pantalones y la poca luz no vería nada, mejor alejarlo de mí con los ojos puesto en un punto en otra galaxia. Pero en la salida tuvimos que ponernos en fila, él delante y yo detrás, puesto que entraba otra pareja. Como se detuvo antes que yo me diera cuenta termine pegándome a él y él notando el despertar de Junior. Se giró hacia mí riéndose para ver qué reacción tenía.

-¿Seguro que quieres quedarte en mi casa Hiza?

-Mejor me voy a la mía.-dije con cierto nerviosismo al notar que sí, se había dado cuenta.-Así que te dejaré en tu casa y me iré a la mía, tienes que descansar.-comenté caminando hacia el coche, rogando que no mirara ahí abajo.

-Vamos Hiza, es algo normal y a todos nos pasa de pronto.-dijo con aquella sonrisa que me hacía caer como un imbécil. Se sentó en el auto cuando lo abrí, pero no dijo nada más.

Me acomodé en mi asiento y comencé a comprobar los espejos, como también a encender las luces del auto antes de ponernos en marcha. Iba meditando qué decir o hacer para disculparme.

-Estaba pensando Hiza.-se mordisqueó el labio interior mirándome con esos ojos de cordero a medio morir.-En qué clase de amigo sería... si te dejo ir a dormir a tu casa con semejante dolor.-acarició mi mejilla bajando su mano hacia el cuello hasta el botón cerrado de mi camisa.-Creo que sería en contra de la humanidad y derechos humanos me lo recriminaría.

-Soy un pobre animalito en tus manos... peta te haría pagar por ello.-dije mirándole con una sonrisa en los labios.

Aunque no era normal ponerme así, quizás porque tenía siempre con quien estar. Pero ahora que solo era él, ahora que únicamente estaba con él, me costaba controlarme además de que no teníamos sexo... solo caricias y besos. Me desesperaba.

Tan desesperado estaba que me sentía como spiderman trepando por las paredes por la desesperación, más bien por la necesidad que no podía suplir de ninguna forma. Ya sabía que estaba ahí la solución de usar a mis cinco amigos y mientras pensar en él, pero no era romántico y sabía que si supiera que en ocasiones lo hacía me lo reciminaría, lo haría de una forma parecida a sus berrinches.

Se acercó más a mí con cuidado, tal vez para no clavarse la palanca de cambios ni el freno de manos, su mano se fue deslizando hacia abajo hasta dar contra mi cadera y luego el cierre de mi pantalón.

El estacionamiento estaba oscuro, las leves luces de los luminosos no eran nada para el lugar donde habíamos aparcado. Aunque no podía ver parecía diestro al bajar la cremallera y los botones de la bragueta. Metió la mano y yo jadeé por inercia, había imaginado ese momento en mi perversa mente durante semanas. Sin embargo, no era lo mismo pensar que sentir.

-Entonces habrá que ayudarte.-susurró.-No queremos ninguna demanda, ni sociedad civil tras mis huesos.

-No, no quiero que te pase nada malo por dejarme así.-susurré proximo a sus labios para volverlo a besar.

No hay comentarios: